Mar de Cortés, Acuario del Mundo

En el Mar de Cortés confluyen las playas de cuatro Estados: Baja California Sur, Baja California, Sonora y Sinaloa, tiene una extensión aproximada de 1,200 kilómetros y 222 kilómetros de ancho, cuya temperatura que va de 27 a 31ºC en promedio, salinidad, penetración de la luz solar, nutrientes y corrientes marinas hacen posible considerarlo literalmente como una incubadora de especies. No es extraño que sus propiedades permitan que muchas especies de animales marinos lleguen a sus costas ya sea para desovar o para reproducirse.

El Mar de Cortés cuenta con una cientos de especies adaptadas en diferentes hábitats tales como esteros, manglares, terrenos rocosos, que almacenan gran cantidad de nutrientes que dan vida a crustáceos, como cangrejos y camarones, moluscos como almejas, caracoles así como algas.

De la fauna endémica que se reproduce en las aguas cristalinas del Mar de Cortés, se encuentra el pez totoaba, la vaquita, y otras que son características de la región como morenas, gobios, alimentados por peces de menor tamaño. También pueden encontrarse bagres, pulpos, entre cientos de animales acuáticos, y otros que comparten espacios entre la playa y la arena como las tortugas jabalinas, de carey de vistosos colores.

Mamíferos de gran tamaño pueden observarse dentro y fuera de sus aguas; lobos marinos, focas, pelícanos, garzas, gaviotas. De gran atractivo resulta la visita de ballenas y delfines, que son el deleite de los turistas quienes observan estupefactos a la ballena gris. Este mamífero llega a aparearse y a tener a sus crías en las aguas cálidas del Golfo de California.

Las ballenas recorren un largo camino, desde las frías Aguas de Alaska y el Mar de Bering, llegan a la calidez y riqueza de fauna marina que las alimenta, terminando su largo viaje cada diciembre, y permaneciendo en por tres meses, después de los cuales comienzan nuevamente su ciclo vital.

Artículo Producido por el Equipo Editorial Explorando México.
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Foto: Jorge Aboumrad Vega