Mariano Azuela

Mariano Azuela nació el 1 de enero de 1873 en Lagos de Moreno, Jalisco. Estudió y ejerció medicina profesionalmente, pero pasó a la historia como uno de los mejores escritores de México.
Durante su niñez, le fascinaban las historias de su abuelo, quien era arriero y famoso en su pueblo como gran contador de historias. En la universidad, a Mariano Azuela se apasionó de la literatura y fue muy influenciado por su escritor favorito, Emilio Zola, padre del naturalismo.

Su primer libro se titula “Registro”, es un diario íntimo escrito en 1889 que apareció publicado en 1896. En 1907 publicó su primera novela, “María Luisa”, donde trata los males sociales desde una perspectiva naturalista. Definió su estilo con sus rasgos característicos en las obras de sátira social con crudo realismo expresivo y construcción clásica al publicar “Los Fracasados” (1908), “Sin Amor” (1912) y “Mala Yerba” (1909). En esta última retrata su prioridad, los campesinos humillados que se sublevan contra sus patrones.

Durante la presidencia de Francisco I. Madero, Azuela trabajó como jefe político de Lagos y posteriormente, como Director de Educación del Estado de Jalisco. Tras la caída de Madero, participó como médico militar con el ejército de Francisco Villa. Retrató magistralmente esa experiencia con las tropas y grupos revolucionarios en “Los de Abajo” (1916), la obra realista que lo lanzó al estrellato literario. La forma espontánea y apasionada en la que los campesinos se unieron a la lucha revolucionaria es el tema principal de esta famosa novela, donde Azuela exhibe con hermosa fidelidad ese caos generado por el choque de fuerzas entre los partidarios de la Revolución que se lanzaron a las armas sin ningún entrenamiento militar.

Azuela destaca por narrar la cruda realidad social con compasión hacia los oprimidos y amor a la verdad y la equidad, con desprecio hacia la injusticia y la maldad. Su obra es una severa crítica contra los asfixiantes convencionalismos sociales y los abusos de un régimen corrupto, por lo que siempre destaca con orgullo el proceso emancipador que esperanzó a la Revolución. En cada una de sus obras, se lee el retrato de la realidad y la voluntad de cambiarla. Los antagonistas en sus relatos siempre son hombres injustos, déspotas hacendados, caciques explotadores, jefes arbitrarios o tiránicos parientes.

Su obra muestra una gran habilidad para mezclar la realidad social con el estilo de vanguardia, siendo el único mexicano que experimentó con el arte vanguardista antes de 1925; en la dinámica de la lucha armada, destacan los cuadros rápidos, violentos y realistas.
A esta novela le siguieron otras dos con el tema de la Revolución, “Los Caciques” (1917) y “Las Moscas” (1918). Otras de sus famosas obras son “Las tribulaciones de una familia decente” (1918); “La luciérnaga” (1932); “Nueva Burguesía” (1941); “La mujer domada” (1945); y “Sendas perdidas” (1949), siempre criticando los defectos de la sociedad y estructura mexicana.

En 1942, Mariano Azuela recibió el Premio Nacional de Literatura en reconocimiento a su extraordinaria trayectoria. En 1949, recibió el Premio Nacional de Artes y Ciencias. Mariano Azuela, uno de los escritores mexicanos más leídos, murió el 1 de marzo de 1952 en la ciudad de México. Sus restos se encuentran en la Rotonda de los Hombres Ilustres del Panteón de Dolores de la Ciudad de México.



Artículo Producido por el Equipo Editorial de Explorando México.
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Foto: Arts-History